Follaje entre las hileras de Colsanto

Fenómeno natural que nos fascina y encanta a todos por el cambio cromático del follaje de sus tonos verdes de verano (debido a la presencia de clorofila) a los tonos típicamente otoñales de amarillo, naranja, morado, marrón y rojo.

En particular, en el mundo de la viticultura, este espectáculo nos ofrece panoramas de una belleza sublime y pintoresca. La vid, que está a punto de cerrar su enésimo ciclo de vida, anticipa su descanso invernal luciendo un follaje otoñal que capta la mirada hasta del transeúnte más desatento.

En la Strada del Sagrantino, en Cantina Colsanto, la extensión de vides en forma de abanico crean paletas de tonos cambiantes de amarillo, naranja y rojo. El paisaje se transforma en un cuadro de conmovedor esplendor.